“Ciudad Mujer”, de El Salvador, modelo a imitar

Vicepresidenta dice violencia es un mal que hay que derrotar

SANTO DOMINGO. Encontrar un lugar donde confluyan todas las instituciones que intervienen (Ministerio Público, Salud Pública, Ministerio de la Mujer, Policía, etc), podría ser la salvación de miles de mujeres que sufren algún tipo de violencia de género en sus vidas.

Ese lugar existe en El Salvador, y se llama “Ciudad Mujer”, un programa del gobierno de ese país, que concentra 16 instituciones que prestan diferentes servicios especializados para las mujeres, “garantizando que sean atendidas de manera oportuna, en un ambiente de confiabilidad y calidad”.

Así lo explicó ayer su creadora, Vianda Pignato, ex Primera Dama de El Salvador y actual secretaria de Inclusión Social, durante el almuerzo-conferencia “Realidades sobre la situación de la mujer y propuestas de abordaje integral: el caso de Ciudad Mujer”, organizado por la Vicepresidencia de la República a propósito del Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer.

“Ciudad Mujer es la propuesta de un país que reclamaba cambios urgentes, eficientes y sostenibles para las mujeres, quienes históricamente habían estado excluidas de las políticas públicas”, expuso Pignato, a una audiencia formada en su mayoría por mujeres.

Destacó que el proyecto, que ya tiene tres años, es un modelo que puede ser incorporado en cualquier parte del mundo, y en ese contexto, invitó al país a asumirlo. “Pero más que una concentración, la clave del trabajo de Ciudad Mujer es que las instituciones trabajen de forma articulada, cada una en el marco de sus propias competencias, pero rompiendo la fragmentación que es tan usual en el servicio público”, detalló.

Pignato citó como los principales focos de violación a los derechos humanos de las mujeres en la actualidad, el sexismo en la educación, la violencia económica, la discriminación en el conocimiento y goce de los derechos sexuales y reproductivos, la violencia en todas sus manifestaciones y la persistencia de dificultades para el ejercicio de los derechos políticos.

Recordó que la violencia de género causa más víctimas que los conflictos armados, e incluso que el cáncer de mama y cérvico-uterino.

De su lado, la vicepresidenta dominicana, Margarita Cedeño de Fernández, dijo que la violencia contra la mujer es un mal que “tenemos que derrotar por el bien de nuestra sociedad”, y llamó a las dominicanas a seguir luchando y buscar ayuda cuando la necesiten.

Hasta octubre pasado, la Procuraduría registraba 72 feminicidios, uno más que el total del 2013.

¿Quizás en RD?

Para la ministra de la Mujer, Alejandrina Germán, la experiencia salvadoreña es “excelente”, y “un buen modelo para los países como el nuestro que necesitamos impulsar políticas públicas coherentes, e interinstitucionales para los derechos de la mujer”.

En tanto, Cedeño de Fernández manifestó su aspiración de algún día replicar la experiencia en el país.