En un auto común y con una escolta reducida, Francisco llegó al Palacio del Quirinale para reunirse con el presidente italiano.
Dejando de lado ciertas cuestiones protocolares para hacer la visita sin tantos formalismos, el papa Francisco visitó hoy en el Palacio del Quirinale, antigua residencia de verano de los pontífices y actual Casa de Gobierno italiana, al presidente Giorgio Napolitano.
Con una escolta reducida, Francisco llegó al Palacio tras mezclarse entre el tránsito romano con el Ford Focus azul que los trasladaba. Los transeúntes, sorprendidos, lo saludaban atónitos. Luego, sin guardia de honor, fue recibido por Napolitano.
Es la tercera vez que el Papa y Napolitano se ven, pero la primera de Francisco al Quirinale, una visita en respuesta a la que realizó el presidente Napolitano al Vaticano el pasado 8 de junio. Es además la quinta visita que realiza un pontífice a este palacio romano desde el nacimiento de la República.
El encuentro privado tuvo lugar en el estudio del presidente Napolitano, al tiempo que se reunieron las dos delegaciones, encabezadas por el presidente del gobierno Enrico Letta, por Italia, y monseñor Angelo Becciu, sustituto de la Secretaría de Estado, por parte del Vaticano.
Luego siguió el intercambio de dones en la Sala de los Tapices. El presidente Napolitano regaló al Papa una estampa del pintor Giovanni Battista Piranesi, mientras que el Pontífice donó al jefe del Estado italiano dos bronces del escultor Guido Veroi.
Luego el Papa rompió el protocolo y saludo a empleados del palacio ejecutivo y algunos de sus familiares que estaban allí para conocerlo.
Dejando de lado ciertas cuestiones protocolares para hacer la visita sin tantos formalismos, el papa Francisco visitó hoy en el Palacio del Quirinale, antigua residencia de verano de los pontífices y actual Casa de Gobierno italiana, al presidente Giorgio Napolitano.
Con una escolta reducida, Francisco llegó al Palacio tras mezclarse entre el tránsito romano con el Ford Focus azul que los trasladaba. Los transeúntes, sorprendidos, lo saludaban atónitos. Luego, sin guardia de honor, fue recibido por Napolitano.
Es la tercera vez que el Papa y Napolitano se ven, pero la primera de Francisco al Quirinale, una visita en respuesta a la que realizó el presidente Napolitano al Vaticano el pasado 8 de junio. Es además la quinta visita que realiza un pontífice a este palacio romano desde el nacimiento de la República.
El encuentro privado tuvo lugar en el estudio del presidente Napolitano, al tiempo que se reunieron las dos delegaciones, encabezadas por el presidente del gobierno Enrico Letta, por Italia, y monseñor Angelo Becciu, sustituto de la Secretaría de Estado, por parte del Vaticano.
Luego siguió el intercambio de dones en la Sala de los Tapices. El presidente Napolitano regaló al Papa una estampa del pintor Giovanni Battista Piranesi, mientras que el Pontífice donó al jefe del Estado italiano dos bronces del escultor Guido Veroi.
Luego el Papa rompió el protocolo y saludo a empleados del palacio ejecutivo y algunos de sus familiares que estaban allí para conocerlo.