Parques y plazas muy deteriorados en Santiago

La situación impide el disfrute de los espacios públicos

Las plazas han sido abandonas por la autoridad municipal.

SANTIAGO. Parques y plazas que en esta ciudad fueron construidos para el disfrute de niños y adultos están deteriorados y abandonados, y por demás se han convertido en lugares inseguros para quienes se atreven a frecuentarlos.

En esos espacios ocurren escenas y actos que van contra las buenas costumbres y la moral de los ciudadanos de esta localidad.

Hoy día en estos centros de esparcimientos, especialmente en horas nocturnas, desaprensivos aprovechan la oscuridad para cometer sus fechorías en perjuicio de los ciudadanos. De igual forma, sus áreas son utilizadas por desvergonzados para realizar sus necesidades fisiológicas, dejando en el lugar un fuerte hedor a orina y a materias fecales.

Munícipes entrevistados por Diario Libre en los principales centros de esparcimientos públicos consideraron que la forma más práctica de proteger y mantener el cuidado de esas instalaciones es colocando vigilancias, ya que carecen de un personal que vele por el mantenimiento de sus estructuras, para que estos lugares vuelvan a ser plazas que congreguen a las familias santiagueras.

Recientemente, el Ayuntamiento comenzó los trabajos de remodelación del parque Duarte, el cual fue demolido para su arreglo, pero los trabajos fueron abandonados, quedando en sus extensiones materiales de construcción, escombros y otros obstáculos que dificultan el libre acceso peatonal. Mientras, el histórico parque Imbert, uno de los escenarios utilizado para repeler la agresión de los invasores haitianos el 30 de marzo de 1844, se ha convertido en un nido de delincuentes y casa de enajenados mentales.

En tanto, el parque Padre Emiliano Tardif, ubicado en la avenida Circunvalación Sur, próximo al Centro Histórico de Santiago, se encuentra totalmente desmantelado. Los malhechores cargaron con todos los bancos de metal, cableado eléctrico y sus lámparas.

“Por la oscuridad y soledad, este lugar es utilizado por personas adictas a las drogas a altas horas de la noche para mantener sus vicios”, señaló Luis Peña, quien solía utilizar el parque para distraerse y despejar la mente.

Un residente cercano al parque Winston -Chilote- Llenas, cuyo nombre fue puesto en honor al emblema del béisbol de la ciudad Corazón, aseguró que ese lugar no recibe mantenimiento desde hace muchos meses.

“Hace tiempo que aquí se robaron las lámparas, en las noches el parquecito es alumbrado por el banco que está ahí al lado”, indicó Luis Jáquez, quien suele sentarse debajo de los árboles a leer el periódico.