BEIRUT, Líbano. - El grupo Estado Islámico difundió el domingo un video donde un miliciano vestido de negro afirma haber decapitado al cooperante estadounidense Peter Kassig, capturado el año pasado.
El miliciano aparecía de pie sobre una cabeza cortada, pero no fue posible confirmar en un primer momento que Kassig, de 26 años, apareciera en el video. No hubo representantes de la familia disponibles de inmediato para hacer comentarios.
El video, subido a sitios web que el grupo armado ha empleado en el pasado, parece ser el más reciente de una serie de macabros mensajes a Estados Unidos amenazando con más brutalidad si Washington no abandona su campaña de bombardeos en Irak y Siria.
"Éste es Peter Edward Kassig, un ciudadano estadounidense, de su país. Peter, que combatió contra los musulmanes en Irak, cuando servía como soldado", afirma el miliciano hacia el final del video de casi 16 minutos. El miliciano habla con un claro acento británico, aunque su voz se distorsionó para complicar su identificación.
El video identifica el lugar como Dabiq, un pueblo en la provincia siria de Alepo, cerca de la frontera turca.
En las imágenes también se mostraba lo que parecían decapitaciones masivas de varios soldados sirios capturados. Los milicianos advierten que los soldados estadounidenses se enfrentarán a un destino similar.
"Te advertimos, Obama, afirmas haberte retirado de Irak hace cuatro años", dice el miliciano. "Aquí estás: no te has retirado. En cambio has ocultado algunas de tus fuerzas detrás de tus representantes", dijo en referencia aparente a los rebeldes sirios apoyados por Occidente, los combatientes turcos y los militares iraquíes.
El grupo tiene en su poder al periodista gráfico británico John Cantlie, al que han exhibido en varios videos hablando en nombre del grupo, presumiblemente bajo amenazas.
Kassig, un ex ranger del ejército estadounidense, prestaba asistencia médica a sirios que huían de la guerra civil en el país cuando fue capturado en territorio sirio el 1 de octubre de 2013. Sus amigos dicen que se convirtió al islam durante su cautiverio y cambió su nombre a Abdul-Rahman.
Grabaciones anteriores mostraron la decapitación de dos periodistas estadounidenses y dos cooperantes británicos. En el último video no se mostró la decapitación de la persona identificada como Kassig.
La familia de Kassig dijo en una declaración que están al tanto del video y que aguardan confirmación del gobierno estadounidense.
"La familia solicita respetuosamente que la prensa evite hacerles el juego a los secuestradores y que se abstenga de publicar o transmitir fotografías o videos distribuidos por los secuestradores", afirmó.
"Preferimos que sobre nuestro hijo se escriba y recuerde por la importante obra y el amor que alimentó por sus amigos y familia y no por el modo en que los secuestradores usan y manipulan a los estadounidenses para promover su causa".
La Casa Blanca dijo que se trataba de determinar la autenticidad del video. La portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Bernadette Meehan, dijo que si el video es auténtico, la Casa Blanca se sentiría "asombrada por el asesinato brutal de un estadounidense inocente". Agregó que la Casa Blanca manifestaba su profundo pesar a la familia y amigos de Kassig.
El video se difundió minutos después que el presidente Barack Obama partió de Australia de regreso a Estados Unidos, después de asistir a una cumbre económica.
Kassig formó una organización llamada Asistencia y Respuesta de Emergencia Especial en Turquía para prestar ayuda y asistencia a refugiados sirios. Comenzó repartiendo comida y suministros médicos en campamentos de refugiados sirio en 2012. Además, dada su formación como asistente sanitario, prestaba cuidados de traumatología a civiles sirios heridos y ayudó a formar a 150 civiles para que prestaran atención médica.
El grupo Estado Islámico ha decapitado y ejecutado a tiros a cientos de rehenes, en su mayoría soldados sirios e iraquíes, durante su rápido avance por ambos países, y ha realizado asesinatos masivos en una serie de videos de cuidada producción y violencia extrema.
El grupo declaró la creación de un califato islámico en las zonas que controla en Irak y Siria, que gobierna siguiendo una estricta versión de la ley islámica sharia.
Estados Unidos emprendió este año una campaña de ataques aéreos en Irak y Siria en un intento de detener el rápido avance del grupo, con vistas a dañarlo y destruirlo.