SANTIAGO DE CHILE.- La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, anunció ayer un plan que involucra una inversión de 20.000 millones de pesos (unos 36,36 millones de dólares) para fortalecer las escuelas públicas, a ponerse en marcha en el segundo semestre de este año.
Los recursos, según la mandataria, provendrán del Fondo de Apoyo a la Educación Municipal, que tiene previsto a partir de julio un aumento del 17 %, equivalente a los 20.000 millones de pesos señalados, y no de la reforma tributaria, actualmente en trámite legislativo, con la que busca financiar los cambios de fondo en el sistema educativo.
Los municipios podrán usar esos recursos para mejorar su situación financiera y poner en marcha proyectos para mejorar la calidad de la enseñanza que entregan, dijo el ministro de Educación, Jaime Eyzaguirre, que acompañó a Bachelet en un liceo del municipio santiaguino de Lo Prado, donde la mandataria hizo los anuncios.
Eyzaguirre subrayó que se trata "de una transición hacia la desmunicipalización" de la enseñanza pública, incluida en la reforma del sistema educacional que impulsa el Gobierno.
Con estos recursos, explicó, los municipios "podrán desahogar las deudas que han ido acumulando", como los pagos de seguridad social a profesores y funcionarios, situación que impide a las corporaciones municipales recibir la subvención escolar y que según datos de la Asociación de Municipalidades, afecta a dos tercios de esas corporaciones, es decir, a unas 240.
También, añadió, se podrán hacer mejorías en infraestructura, física o digital, como la instalación de redes de wifi en los colegios o la incorporación de tabletas electrónicas en la enseñanza de párvulos y básica, o mejorar las bibliotecas.
Además se pondrán en marcha algunas iniciativas en apoyo de los profesores, como ampliar los programas de capacitación hasta 10.000 en 2015 y 50.000 en los cuatro años del Gobierno, así como la financiación de un programa de formación de directores.
Asimismo, se creará un fondo de desarrollo y participación estudiantil, para que los alumnos puedan realizar viajes de estudio, asistir a encuentros o competencias regionales y nacionales, además de otra partida para fortalecer los centros de alumnos.
Eyzaguirre destacó que se trata "de un programa potente, pero no es la solución definitiva" de los problemas de la enseñanza pública, "que va a tomar más tiempo y tiene que ver con la desmunicipalización".
En 1981 la dictadura de Augusto Pinochet entregó a los municipios la administración de la enseñanza básica y secundaria, y devolverla al Ministerio de Educación es uno de los objetivos de la reforma que impulsa Bachelet.
"Estamos aquí hoy para reafirmar nuestro compromiso con la educación pública, devolviéndole el sitial que le corresponde y que nunca debió perder", afirmó hoy la presidenta chilena, que definió las medidas más inmediatas, anunciadas hoy, como "una agenda corta" para el sector.
"Como hija de la educación pública, desde primer año hasta la universidad, sé que una educación pública de calidad puede otorgar todas las oportunidades que nos merecemos cada uno de los que vivimos en nuestra patria", sostuvo.